BIODEGRADABLE

Existen muchos productos que desechamos al no encontrarles ningún valor, uso o utilidad para nosotros, usualmente estos terminan en el relleno sanitario o vertedero de nuestros pueblos o ciudades, esperando su tiempo para descomponerse. Todas las cosas en este mundo tienen su tiempo contado, les lleva más o menos tiempo degradarse de una u otra forma. Una manera es la biodegradación.

La biodegradabilidad es la facultad de algunos materiales de reintegrarse a la tierra por acción de la naturaleza, que es cuando algo es deshecho por organismos vivos (principalmente bacterias).

En el proceso de biodegrabilidad algunas sustancias químicas (desechos orgánicos, papel, etc) pueden ser empleadas como alimento por los microorganismos, que las utilizan para producir energía y crear otras sustancias como aminoácidos, nuevos tejidos y nuevos organismos. El material orgánico pude ser degradado de forma aeróbica, con oxígeno (al aire libre), o de forma anaeróbica, sin oxígeno (algo enterrado).

La biodegradabilidad de los materiales dependen de su estructura física y química, algunos como el vidrio no pueden ser biodegradados. Aunque se suele decir que un material no es biodegradable cuando el tiempo necesario para que los organismos lo descompongan es extremadamente largo, o supera la capacidad de los organismos para procesarlo, como pasa con el plástico y el aluminio de las latas. Hoy en día muchas cosas se fabrican con agentes biodegradables, como pasa con los detergentes, pero todavía están los plásticos y diversas sustancias como los insecticidas.

Todo material se considera biodegradable, pero muchos tardan hasta siglos en descomponerse. En condiciones óptimas de descomposición (biodegradación), sea presencia de aire (oxígeno), luz solar y humedad.

¿Cuánto tarda la biodegradación de algunos residuos?

Los desechos que a continuación se detallan pueden tardar lo siguiente en biodegradarse:
  
  • Un par de medias de lana: 1 año
  • Celofán: 1 a 2 años
  • Trapo de tela: 2 a 3 meses
  • Estaca de madera: 2 a 3 años
  • Estaca de madera pintada: 12 a 15 años
  • Bambú: 1 a 3 años
  • Envase de lata: 10 a 100 años
  • Envase de aluminio: 350 a 400 años
  • Materiales de plástico: 500 años
  • Cáscara de banana: 2 a 10 días
  • Bolsas de plático: 150 años
  • Pañuelos de algodón: 1 a 5 meses
  • Papel: 2 a 5 meses
  • Cáscara de naranja: 6 meses
  • Cuerda o soga: 3 a 14 meses
  • Zapatos de cuero: 25 a 40 años
  • Vasos de aislante térmico de poliestireno “Styrofoam”: 1 a 100 cien años

¿Qué tipo de desechos pueden ser reciclados?


La basura, en el fondo, es aquello que sobra porque ya no es posible darle alguna utilidad. Sin embargo, casi el 100% de lo que tiramos en verdad no es basura: puede reutilizarse, es posible sacarle algún provecho. Muchos de los materiales que tiramos diariamente a la basura son reciclables.

Desechos orgánicos: constituyen la mayor parte de los residuos sólidos domiciliarios, tales como: las heces, los restos de comida, poda de jardines y plazas, desechos de ferias. Pueden ser reciclados transformándolos en abono orgánico o compost. Este abono es similar a la tierra de hojas, pero es más nutritivo al ser producto de más elementos orgánicos que se descompusieron.

Papeles y Cartones: casi todos son reciclables, excepto aquellos que están muy sucios o plastificados. En el proceso de reciclaje se utiliza el papel o cartón como base para la fabricación de nuevo papel. Por ejemplo para cuadernos, envases y embalajes, papel higiénico, toallas de papel y servilletas.

Vidrios: es un material duro e higiénico, usado principalmente en botellas y frascos. A través de un proceso de fundición puede ser continuamente reciclado para producir botellas nuevas.

Plásticos: es fabricado a partir del petróleo, es un material liviano y resistente que sirve para hacer muchos productos, tales como envases (bolsas, frascos, bidones, etc.), cañerías, artefactos domésticos; existiendo muchos tipos de plásticos, sólo algunos de ellos pueden ser reciclados industrialmente, como por ejemplo algunos envases de bebidas.

Metales: a nivel de consumo doméstico se usan principalmente para la fabricación de latas o tarros para conservas y bebidas entre otros; pueden ser fabricados de diferentes metales: aluminio, estaño, acero. La producción de estos envases metálicos es bastante más costosa que la del vidrio e igualmente implica usar recursos naturales no renovables (metales), y producir contaminación atmosférica y acuática. Actualmente el aluminio está siendo cada vez más usado y su reciclaje también va en aumento.

Por eso, la proxima vez que arrojes algun residuo, recuerda esta información y el impacto que tendrá tu deshecho en el medio ambiente.


Compilado de:

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Alimenta nuestro blog con tus aportes ¡Gracias!